Suele ocurrir en varios sectores e industrias: las tendencias se construyen a base de rescatar antiguos materiales o formas del pasado. En otras ocasiones, se resucitan elementos que fueron mayoritarios entre la clase obrera. Es un comportamiento que hemos visto en la moda y que también se da en la decoración.
¿Qué es el terrazo?
El terrazo es un material compuesto de cemento endurecido en cuya superficie se le añaden áridos como el mármol o piedras trituradas combinado con pigmentos que le dan el color dominante, si bien en la actualidad se utilizan también otros materiales como resinas epoxy. Suele venir en baldosas y en acabado pulido, aunque también se puede aplicar de forma continua, si se hace directamente en obra. Este material es originario de Venecia, donde a mediados del siglo XV empezó a utilizarse como forma de aprovechar los trozos que sobraban de las construcciones de mármol.
Duro, resistente y muy muy práctico (es uno de los materiales con menos necesidades de conservación), resulta válido tanto para interior como para exterior.
Formatos
El terrazo lo podemos encontrar de grano muy fino, de grano medio o con grandes piedras. Ya es cuestión de gustos el optar por uno o por otro.
Colores
Tradicionalmente el terrazo lo hemos visto fundamentalmente en tonalidades arena, blanquecinos o tirando a cremas o naranjas suaves.
No obstante, en esta nueva hornada los fabricantes permiten elegir entre una amplia gama de tonalidades, incluyendo rosas, negros, turquesas o multicolor.
Aplicaciones
Dada su dureza y escaso mantenimiento, el hábitat natural del terrazo seguirán siendo los pavimentos.
Para darle un aire más elegante que antaño, se recomienda optar por tonos grisáceos que acompañan perfectamente con cualquier mobiliario o elemento decorativo.
Y para los que deseen algo más de originalidad, se podrán realizar distribuciones irregulares del grano o dibujos específicos.
Como aplicaciones algo distintas a lo que estamos acostumbrados, lo veremos también en mobiliario de baño y encimeras de cocina.
Otros soportes, como escaleras, lámparas o bajo-barras no escaparán a su influjo, especialmente si se quiere potenciar su efecto, optando en este caso por diseños atrevidos y coloristas.
De igual modo, veremos diseños de lo más creativos, en los que el revestimiento completo de estancias (suelos, techos y paredes) crearán efectos visuales muy potentes.