Los colores dicen mucho de nosotros mismos y de nuestro hogar. Por ello es necesario hacer un uso óptimo de las distintas tonalidades, al tiempo que les sacamos el máximo partido. Y es que cuando hablamos de decoración, hay que tener en cuenta que no todo vale. En este artículo te enseñamos a elegir los colores que más convienen a cada estancia, siempre en función de su utilidad o de tus propias necesidades.
Aprende a combinar colores y haz de tu hogar un lugar perfecto y armonizado:
- Amarillo: es el más expansivo de todos y resulta ideal para ambientes con poca luz natural.
- Naranja: también brinda un efecto muy luminoso pero en ambientes de mayor escala.
- Rojo: puede generar un clima muy cálido, sin embargo si no esta bien dosificado puede resultar agobiante porque tiene una presencia muy fuerte.
- Azul: transmite seriedad, es fresco y resulta ideal para lugares de relax, como el dormitorio o un estudio hogareño.
- Violeta: también es relajante y resulta es muy agradable, al ser muy intenso hay que aplicarlo delicadamente.
- Blanco: es el más luminoso de todos y potencia otros colores. Lo recomendable es no utilizarlo en estado puro para que no genere un efecto óptico muy potente, conviene dosificarlo con negro o marrón.
- Gris: no influye en los otros colores, resulta elegante y es un buen neutro, entre el blanco y el negro. También es ideal para potenciar y hacer más luminosos los colores intensos.
- Negro: es elegante, potencia mucho los colores brillantes.