La utilización de paredes de ladrillo visto en el interior de las viviendas es una técnica en decoración que vemos con frecuencia en viviendas de estilo escandinavo.

Es un tipo de revestimiento que admite diversas combinaciones en cuanto a mobiliario y resto de materiales. Se puede dejar en su color original o pintarlo, por ejemplo:

  • Paredes recuperadas: En muchas casas antiguas se pueden encontrar este tipo de tabiques bajo el enlucido. No suele ser fácil sacarlo a la luz y el resultado no es totalmente liso, pero le da un aspecto industrial único a cualquier rincón de casa.

  • Paredes nuevas: Si no tienes la suerte de contar con este tipo de paredes desde la construcción del edificio, siempre puedes hacerte una desde cero. El resultado suele ser más rectilíneo y liso.

  • En cualquier lugar: En el salón, en la cocina o incluso en el baño, queda genial en cualquier lugar.

  • Ladrillo blanco: Si te van más los colores neutros como los blancos y grises, o si la estancia es pequeña, siempre puedes pintar los ladrillos de blanco para ganar más sensación de amplitud, el resultado es espectacular.

  • Ladrillo negro: el ladrillo visto pintado en negro también queda impresionante. Hay que tener más cuidado respecto a su posición, ya que será una pared que captará todo el protagonismo.

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